Caminar sobre la húmeda arena, esperando por tus amigos que se ven a lo lejos. Colocar una manta bajo la sombrilla para resguardarse del sol mientras cae la tarde y bebés tragos refrescantes con los que más quieres después de un placentero día en la playa… Así se siente escuchar Talking for hours, el más reciente lanzamiento de la banda Hearing Aid Beige. 

La música exhibe caleidoscópicos guiños al pasado, que van desde los confesionarios al estilo de Brian Wilson hasta el indie pop relajado influenciado por Mac Demarco y Connan Mockasin. Un complejo entramado de nostálgicas armonías vocales, flexibles líneas de guitarra y estribillos de ensueño evocan sin esfuerzo un paisaje de colores pastel de caminos rurales y vistas costeras, dando como resultado un tipo de rock para disfrutar recostado en una hamaca. 

Talking for hours nos habla sobre un verano que duró toda la vida, como en el imaginario adolescente. La banda sumerge a sus escuchas en sonidos que evocan una película al estilo “teenager” en la que ellos son los protagonistas de una escena bajo el mar a través de suaves notas creadas a partir de una guitarra eléctrica y un wurlitzer. 

Esta es la historia de dos personas que podían quedarse despiertas hasta tarde sin importar la hora, hablar hasta el amanecer y observar cómo cada pétalo de las flores se abría con la salida del Sol. Un amor puro de verano que al recordarse solo puede producir una cosa: alegría. 

Así lo describen Tommy Williams y Simon Hampshire, las mentes creadoras detrás de la música de Hearing Aid Beige. 

“Cuando compusimos esta pieza no pensábamos en otra sensación que la de la pureza de un amor adolescente. El sube y baja de emociones que sentimos cuando estamos con alguien que nos atrae muchísimo y ambos somos tan torpes como para confesar nuestros sentimientos. Hablar por horas con el otro sin aburrirse porque la química es genuina”, comentó Toomy. 

Sin duda, varios de nosotros tendremos un recuerdo con algún amor platónico que nos haga rememorar la espinita por sentirnos anhelados, tal y como nosotros hacíamos con él. Un sentimiento casi universal. 

“Todos hemos experimentado ese nerviosismo cuando estamos con alguien que nos atrae, uno que adquiere una emoción aún mayor cuando es mutuo. Nada nos aburre, todo nos apasiona y queremos saberlo todo, saborearlo todo. Eso queríamos plasmar con este sencillo”, describió Simon. 

Este sencillo fue producido por Tommy Williams y Simon Hampshire, grabada en el estudio de la banda en Totnes, Devon.

Acerca de Hearing Aid Beige

Con sede en Totnes, una pequeña ciudad del suroeste del Reino Unido, Simon Hampshire y Tommy Williams han creado un dúo perfecto para componer canciones. Simon reparte su tiempo entre la arquitectura y otros proyectos musicales, Tommy, por su parte, es un experimentado productor e ingeniero de audio en directo para artistas como Bonobo, Honne y Jordan Rakei.

La personalidad artística de ambos hace de Hearing Aid Beige una banda que cuida hasta el más mínimo detalle de sus creaciones. Desde la estética perfectamente definida de su obra, hasta las capas de sonido cuidadosamente producidas en cada canción, componen un mundo habitado por hipnotizantes armonías vocales, figuras geométricas, estribillos de ensueño y colores pastel. Cuando tocan en directo, les acompañan sus amigos y músicos de siempre, Brain Rays, Cape Khoboi y Lunchtime Sardine Club.